La mujer de piedra,
quien sabe decir adiós sin dar la vuelta,
quien enfrenta el dolor con gran destreza.
mujer vestida de indiferencia,
ataviada de orgullo, disfrazada de nobleza,
acostumbrada a hacer del llanto una comedia.
quien sabe decir adiós sin dar la vuelta,
quien enfrenta el dolor con gran destreza.
mujer vestida de indiferencia,
ataviada de orgullo, disfrazada de nobleza,
acostumbrada a hacer del llanto una comedia.
¡Qué tan poco me conociste!
fue una tristeza,
no supiste que mi alma triste moría sedienta,
que mi corazón en su palpitar pedía clemencia,
que mis ojos desvelados vagaban noches enteras.
no supiste que mi alma triste moría sedienta,
que mi corazón en su palpitar pedía clemencia,
que mis ojos desvelados vagaban noches enteras.
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