Tenías una vida antes de conocer a esta mujer y la tendrás después de
que se haya ido, tengas consciencia de ello o no. Sea lo que sea,
necesitarás seguir adelante con tu vida y empezar a darte cuenta que es
la única que tienes, así que no la desperdicies deprimiéndote. Con un
poco de tiempo y distracciones, podrás ver que es posible olvidarla y no
merece tu atención. Empieza a olvidarla hoy empezando con el paso 1 a
continuación.
Parte 1 de 3: Deshacerte de los recuerdos
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1
Elimina la tentación de ponerte en contacto con ella.
El hecho es que hablar con ella sólo empeorará todo. Estarás pensando
en ello todos los días, así que enfréntate a la realidad y deshazte de
ella. Borra su número telefónico, los mensajes de texto, su correo
electrónico, todas las formas de contacto que hayas tenido con ella.
Cuando tengas la tentación de hacerlo, no cederás.
- Es importante no querer ceder. Piénsalo de esta manera: si te
pones en contacto con ella, parecerás un chico de rodillas implorando
regresar. Les dirá a sus amigas y se reirán bastante de ello. ¿Quieres
ser ese chico? ¡No, gracias! Después de todo, por lo menos te quedará tu
dignidad.
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2
Mantente alejado de las redes sociales. La tecnología
es casi lo peor después de las rupturas amorosas. Aparte de tu teléfono
y correo electrónico, mantente lejos de su Facebook, Twitter,
Instagram, Tumblr y de cualquier otro medio que puedas terminar viendo
por horas durante la noche mientras comes unos tacos y Red Bull. De
todas formas, solamente verás lo que ella
quiere que veas (no etiquetará las fotos de ella vistiendo a su perro), no verás lo que
realmente
está sucediendo en su vida. No servirá para nada ser un acosador de
incógnito para observar su vida a través de un filtro cibernético.
- Si es necesario, borra tu cuenta por completo de Facebook y de
páginas similares. ¡No te perderás de mucho! Además de no desperdiciar
horas de tu vida estando al tanto de lo que tus amigos cenaron, podrás
empezar a vivir el momento y a terminar tus deberes.
-
3
Si tienes que estar junto con ella, no hagas un esfuerzo.
Quizá la hayas conocido en la escuela, el trabajo, una afición común o
mediante un amigo, ¿no? Como tal, es probable que haya ocasiones en las
que
tengas que verla. Es un horror, pero así son las cosas. Si
esto sucede, sé civilizado. Si te habla, respóndele de forma cortante
como lo harías con cualquier otro conocido. Nada más. Ella es como todos
los demás.
- No te expongas a sus críticas con la esperanza de que te hable o
empiece a recordar lo grandioso que eras. Lo que deberás hacer a partir
de ahora es no parecer necesitado ni disponible. ¿Y por qué habrías de
parecer así? Tienes tu propia vida y no la cambiarás en nada sólo por
ella.
-
4
Ve a lugares nuevos. Salías con ella la noche del
miércoles, iban al mismo restaurante por su aniversario, los viernes
preparaban un platillo especial en la casa de Leo. ¿Qué pasará con todo
esto? Necesitarás hacerlas a un lado por ahora. Los miércoles y los
viernes los destinarás ahora a tu liga de billar, además ese restaurante
era muy costoso. Es hora de cambiar un poco y llenar tu vida de
personas y lugares nuevos.
- Cuando estés realmente en un lugar nuevo, tu mente estará en un
lugar nuevo también. Así que úsalo como excusa para explorar tu nuevo
barrio, un Starbucks diferente, un camino diferente para ir al trabajo,
una ruta para correr nueva, lo que sea. De esta manera, te obligarás a
tomar todo este estímulo nuevo, forzando a que se vaya lo viejo.
-
5
Limpia tu espacio. Todas sus pertenencias deberán
irse, además de todo lo que te recuerde a ella, es decir, fotos y
recuerdos personales de su relación. ¡Qué más da! ¡quémalos! Tíralo todo
a la basura. Si tienes algo de valor,
podrías devolvérselo, pero no es obligatorio. Sabes bien que lo que va, regresa.
- Si son demasiadas cosas, pídele a alguien que conozcas que lo haga
por ti. Podría ayudarte a juntar todo y tirarlo a la basura o
devolvérselo. No hay nada de malo si no se lo das personalmente. Sólo
tendrás que pedirle a un amigo que lo deje en su puerta cuando no esté
en casa; no habrá ni daños ni trampas.
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Parte 2 de 3: Pensar sanamente
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1
Desahógate. Quizá no estés acostumbrado, pero hablar
sobre tus sentimientos podría (y es) ser una gran catarsis. No sólo te
sentirás mejor, sino que a veces decir algo en voz alta a alguien te
dará una perspectiva que nunca habías visto. Podría hacerte tomar
consciencia de que estás siendo absurdo o mostrarte un aspecto que no
veías antes. Ya sea de la situación o de ti mismo, ambos descubrimientos
podrían alterar tu perspectiva.
- La otra persona también podría escucharte. Si oír tus propias
palabras no te muestra nada, su perspectiva sobre la situación podría
hacerlo. Además, una persona que te escucha podría aliviar
considerablemente el estrés.
-
2
Permítete pensar en ella, pero no le des vueltas al asunto.
Si alguien te dice: “No pienses en un elefante blanco”, ¿en qué estarás
pensando? Exactamente: en un elefante blanco. Para ello, decirte que no
debes pensar en ella sólo hará que lo hagas de manera más intensa. Así
que cuando surja en tu mente, termina ese pensamiento, pero no te quedes
mucho tiempo haciéndolo. Piensa en otra cosa.
- Oblígate a pensar en otra cosa. Aunque no lo creas, tienes el
control de tus pensamientos. Así que la próxima vez que veas un hueso de
durazno en el suelo y empieces a recordar el único picnic que tuvieron,
termina de pensar en ello, pero luego pasa a otra cosa. Comienza a
pensar en aquel tonto que tiró el hueso de durazno al suelo cuando había
un basurero a metro y medio. ¡Cuiden el medioambiente!
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3
Deshazte de la ira. Si no lo haces, sucederá lo siguiente:
- Conoces a otra chica que es buena gente, linda y le gustas.
- Empiezas una relación amorosa con ella.
- Sigues enfadado y resentido por tu relación pasada.
- Te deja porque eres un amargado y resentido.
- El proceso se repite ad infinitum.
- En el caso de que no te haya quedado claro, este ciclo no es el más
recomendable. Trata de centrarte en lo que tienes, en aquello por lo que
estás agradecido y lo asombroso que eres, porque, en verdad, tienes
muchas otras cualidades. Tantas otras cosas mejores en qué pensar en lugar de ella.
-
4
Recuerda el motivo por el cual ya no están juntos. Si
la vida con ella hubiera sido todo felicidad, todavía seguirían siendo
pareja, punto. ¿Te fue infiel? ¿Peleaban todo el tiempo? ¿La relación
sencillamente no tenía chispa? Hay buenas razones por las cuales esto
sucedió y son
buenas justamente porque te dan la capacidad de buscar a alguien que no tenga aquello.
- 50% del motivo por el cual ya no son pareja es porque mereces
alguien mejor. ¿Te olvidaste de este punto? Alguien que esté a tu lado
en las buenas y en las malas, alguien con quien congenies. Esas chicas
están en algún lado esperándote.
-
5
Canaliza sus defectos. ¿No puedes recordar ninguno? Este fenómeno se denomina “recuerdo eufórico”, mediante el cual sólo recuerdas lo bueno.
[1]
Deja de ver todo color de rosa y empieza a reflexionar. ¿Tenía nariz
grande? ¿Piernas flacas? ¿Una risa molesta? ¿Nunca cambiaba el papel
higiénico? ¿Cocinaba pésimo? Es probable que al final tengas una gran
lista de defectos si lo reflexionas bien.
- Cuando empieces a pensar en lo grandiosa que era, haz el esfuerzo de
evocar un mal recuerdo. Están por ahí en algún lugar. ¿Realmente
quieres lidiar con esa tontería si no es tu obligación?
-
6
Date tiempo. El tiempo no cura todas las heridas,
pero ciertamente te ayudará mucho a enterrarlos y a que los olvides.
Para la mayoría de las situaciones, el tiempo es la solución. Así que
deja de afligirte porque esto no sucede de la noche a la mañana.
Necesitarás tiempo para sanar. Es horrible, pero así funciona. Te las
arreglarás hasta que un día despiertes y te des cuenta de que la habías
olvidado hace un tiempo.
- Entre más tiempo hayas pasado con ella, necesitarás más tiempo para
sanar. Es lógica básica. Así que si han pasado unas cuantas semanas,
estarás cerca de lograrlo. Si han pasado años, date un descanso, tu
corazón y tu mente se sanarán solos con el tiempo.
-
7
Aprende de tus errores. Cuando todo el resentimiento y
el pesar se hayan desvanecido, podrás darte cabida para aprender de tus
errores. ¿Por qué terminaron? ¿Por qué no era compatible contigo? ¿Qué
no harás la próxima vez?
- Este es un paso importante como cualquier otro. Sin este, sólo
estarás en un círculo vicioso con todas las mujeres que conozcas. Es
necesario que conozcas los rasgos que necesitas en una mujer y lo que te
hace más feliz y desdichado.
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Parte 3 de 3: Buscar el cierre y la paz
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1
Pasa más tiempo con tus amigos y familiares. Ahora
mismo, necesitarás buena distracción. Estar solo en casa solamente
ocasionará que abras las compuertas de aquellos pensamientos que no
producirán nada bueno. Así que busca a los contactos de tu red social.
Llama a algunos amigos y haz planes para este fin de semana. Almuerza
con tu mamá porque de seguro te extraña. Ten una agenda tan apretada que
no tengas tiempo de pensar en ella.
- Es probable que creas que la mejor manera de pasar tu tiempo es
acurrucándote debajo de tus mantas, comiendo comida chatarra y no
sacarte la pijama durante días. Si bien esto es tentador, no te darás
cuenta lo bueno que se sentirá salir hasta que lo hagas. Así que, aunque
no tengas ganas de hacer algo con otras personas, oblígate a hacerlo.
Probablemente al final te alegrará haberlo hecho.
-
2
Ten una aventurilla. No es el mejor consejo, y si no
es tu estilo, no le hagas caso, pero tener una aventurilla podría ser
una de las mejores distracciones que podrías tener. ¡Sólo asegúrate de
que la chica nueva sepa que es una aventura! No rompas corazones a
diestra y siniestra, porque el karma no perdona.
- Mantente seguro. No querrás volverte un donjuán hedonista e
insensible. Una aventura no tiene nada de malo, pero ir al bar todas las
noches y amanecer junto a una desconocida, sí que lo es. Así que busca
una chica que quiera divertirse un rato y aprovéchate de ello. Te
demostrará cuántos peces hay en el mar.
-
3
Redescubre un pasatiempo o una afición pasada. Cuando
estabas en una relación, probablemente dejaste olvidadas muchas cosas.
El tiempo te consumía y dejaste de hacer todo aquello que antes
disfrutabas. ¡Vuelve a hacerlo! ¿Qué has dejado de lado recientemente
que te gustaría retomar? Estarás mucho más contento haciendo lo que te
encanta y perfeccionándote en ello. Te sentirás pleno, renovado y lleno
de sentido.
- ¿No sabes qué te apasiona? ¡Búscalo!
Emplea tu tiempo libre para salir de la rutina y descubrir lo que te
motiva. ¿Cuándo fue la última vez que te sentiste completamente
fascinado y en tu elemento? ¡Qué tal distracción!
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4
Ejercítate.
¿Sabes qué te hará sentir bien? Saber que ahora te ves mejor
físicamente que cuando estabas con ella. Así que empieza a ejercitarte y
a levantar pesas. ¡Y ni siquiera hablemos del hecho de que tus
endorfinas se dispararán!
- Cuando tu sangre empiece a bombear y tus endorfinas a fluir, te
sentirás bien. Si lo último que querías hacer era liberar endorfinas, te
sentirás bien. Así que sigue el ejemplo de tu cuerpo y ejercítate.
Estarás más sano, feliz y te verás fantástico también.
-
5
Vive la vida de soltero. Es fácil olvidar lo
maravilloso que era estar soltero. Podrás hacer lo que se te venga en
gana, donde quieras, como quieras, con quien rayos quieras. Podrás
levantarte sin previo aviso, cambiar de planes y ser aventurero.
¡Excelente!
- Sal los fines de semana y quédate fuera hasta las 3 a. m. con tus
amigos. Viaja impulsivamente por varios países. Gasta todo tu dinero en
ti. Pégate un atracón de papas fritas sin vergüenza. Postula a un
trabajo en otro país. Toma las oportunidades, los riesgos y haz algo
sólo para ti.
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