Romperse
El
mundo te romperá en pedazos, sin previo aviso. Y aunque me encantaría
decirte que existe el modo de que eso no te pase, te garantizo que
siempre va a ser así: te romperás una y otra vez, aunque pasen los años y creas que ya has sufrido suficiente, siempre te encontrarás con un nuevo desafío.
La vida es dura y muchas veces, ni
siquiera es justa, pero no por ello debes cruzarte de brazos y
abandonarte a lo que vaya apareciendo en tu camino, debes afrontar los
golpes, uno a uno, y seguir adelante. Cuando te rompas en pedazos, será tu tarea la de construirte de nuevo y no sólo eso, pues te encontrarás una y otra vez con una tarea aún más complicada, la de volver a confiar.
Sin embargo, a pesar de todo esto, aunque
la vida vaya rompiendo tus ilusiones, debes seguir soñando y luchando
por hacer realidad tus sueños, protegerlos con cada paso que des, ¿sabes
por qué? porque si no te ilusionas, si no sueñas, si dejas de vivir
para simplemente sobrevivir, si no amas ¿qué clase de vida estarías
viviendo? El miedo te va a acompañar todo el camino,
pero no puedes dejar que sea él quien te domine y guíe cada uno de tus
pasos, porque la vida, aunque lo quieras negar, en realidad es así: te caes, te levantas y te vuelves a caer.
El problema está en que si ni siquiera te mueves, si no intentas avanzar por miedo a caerte, en realidad, ya te has hundido.
Ha llegado el momento de levantar la
cabeza y salir al mundo, de afrontar esos retos, sin dejar que la vida
te paralice, sin dejar que esa voz que te dice que “no puedes” te
domine.
Puede que las cosas empeoren, pero tu tarea no es la de buscar culpables, sino la de luchar y enfrentarte a lo que tengas por delante, tu tarea es la de impedir a cada una de esas dificultades que se apoderen de ti.
No importa lo fuerte que te golpee la vida, lo que realmente importa es lo fuerte que tú te levantes en cada golpe y lo firme que continúes avanzando, porque así es como ganarás cada batalla.