Ya no discuto. Aprendí que lo que me molesta se evita y que donde la ignorancia habla, la inteligencia calla. Sin duda vivo más tranquilo.
Tú sabes que ponerse a querer a alguien es una hazaña,se necesita una energía, una generosidad, una ceguera... hasta hay un momento, en el que es preciso soltar un precipicio; si uno reflexiona, no lo hace.
No hay comentarios:
Publicar un comentario