La ciudad de Reikiavik es totalmente adecuada para salir en las noches, y para irse de compras en las tiendas en donde predominan los diseños. Las mejores calles con tiendas son la de Laugavegur y Skólavörðustígur.
En el centro de esta ciudad podemos apreciar al Lago de Thjörni, un excelente y adecuado lugar para la relajación. Con relación al casco de antigüedad de esta ciudad, bueno sería emprender un recorrido a través de sus calles y entretenernos de grandiosas edificaciones como el Parlamento. En esta ciudad también podemos hacer una visita a innumerables museos y galerías, que son históricas y muy vanguardistas. Uno de los museos que más se recomienda es el Museo Nacional, debido a que en este lugar sí es posible conocer la historia y tradiciones de Escandinavia. Con relación a la arquitectura moderna, nada sería mejor que asistir a la iglesia de Hallgrímskirkja. No solo esto sino que podemos ir al Aurora Reykjavik, un centro bastante interesante que trata acerca de las auroras boreales.
Reikiavik una ciudad con mucho encanto
Los alrededores de esta ciudad han de ofrecernos indudablemente diversas actividades de ocio en entornos inigualables. Además también es posible practicar pesca de salmones, escaladas, caminatas a través de glaciares, excursiones a caballo entre otras actividades de ocio y entretenimiento. También podemos hacer excursiones para poder conocer a Snæfellsnesjökul, o el Glaciar de Snæfellsnes, un grandioso volcán que se convirtió en un símbolo emblemático del país.
Tampoco debe olvidarse de otros alrededores importantes como el Valle de Elliðaárdalur, así como la playa geotermal de Nauthólsví. En temporadas de verano es recomendable ir en ferry a la isla de Viðey, un sitio que irradia paz, en donde apreciaremos un monumento luminoso dedicado a John Lennon, que se conoce como la Columna de la Paz.
El presidente de Islandia, Olafur
Ragnar Grimsson, de visita en España, no quiso mojarse con la situación griega
pero aseguró que la UE se equivocó con Islandia, “¿por qué deberían tener
razón con otros?”. Olafur Ragnar Grimsson, atribuye directamente la
recuperación económica de su país a no haber aplicado políticas de austeridad y
a no someterse a los consejos de los organismos internacionales, en particular
la Comisión Europea.
Aseguró que la UE debe sacar
conclusiones sobre la fórmula de salir de la crisis: “Los intereses
económicos en una mano y la democracia en la otra”. Rechazó que la
población deba sufrir políticas de duros recortes
presupuestarios e instó al eurogrupo a fijarse en el modelo de
recuperación islandés, y abogó por la combinación de medidas que se utilizaron
en su país, renegociación de la deuda, y una devaluación de la moneda.
Islandia, fue el primer país
colapsado por la crisis bancaria y financiera de 2008, con la caída de Lehman
Brothers quebraron sus tres principales bancos: Landsbanki, Kaupthing y
Glitnir. Pero la sociedad islandesa se movilizó frente a banqueros y políticos,
derrocaron al gobierno, nacionalizaron los bancos, tomaron medidas como la condonación
de deudas hipotecarias a personas con dificultades y se hicieron cargo de la
deuda interna; y mediante referéndum, el 59% frente al 40%, decidieron no
asumir la deuda externa y exigir a los bancos asumir sus errores. Desde
entonces se aplican a la banca severas medidas de control de capital.
Cuando los gobiernos del Reino
Unido y Holanda, principales inversores en los fondos de los bancos islandeses,
exigieron que Islandia pagara la deuda para poder formar parte de la Unión
Europea los islandeses respondieron fieles a su gran tradición democrática y
convocaron otro referéndum en 2009 para someter a votación las condiciones del
pago de 2.350 millones de libras al Reino Unido, y 1.320 millones de euros a
Holanda hasta el año 2046, con un interés del 3%. Esta vez el rechazo fue
mayoritario, el 93,2% decidió no asumir las pérdidas que otros países sufrieran
en la crisis financiera.
Reino Unido y Holanda iniciaron
una batalla judicial y el primer revés llegó en 2013 cuando el Tribunal de la
Asociación Europea de Libre Comercio (AELC) de Luxemburgo respaldaba la
decisión del gobierno de la isla, considerando que el país no violó la ley
cuando se negó a devolver a 300.000 ahorradores extranjeros el dinero
depositado en las entidades bancarias; se enviaba un claro mensaje en palabras
del economista islandés Magnus Skúlasson: “Es una victoria para la
democracia, los bancos no pueden recoger los beneficios y mandar la factura a
los contribuyentes cuando las cosas van mal”
Políticos y
banqueros al banquillo
La pacifica población islandesa se
puso en pie y uso como armas unas inofensivas cacerolas, y provocaron la
renuncia del gobierno.
Se celebraron nuevas elecciones el
25 de abril de 2009, con la participación de candidatos ciudadanos. De esas
elecciones surgió un gobierno de coalición de socialdemócratas y ecologistas de
izquierda, y elegida la primera ministra mujer, Johanna Siguroardottir. En
noviembre de 2010 se creó una Asamblea Constituyente que reformó la
Constitución. Desde entonces, la nueva legislación prohíbe conceder créditos en
divisas extranjeras.
Se creó una comisión de
investigación parlamentaria sobre la crisis y una fiscalía especial. Las causas
se llevaron a los tribunales para depurar responsabilidades. Una de las
detenciones tomó tintes de película, con carteles de la INTERPOL y orden de
busca y captura de un banquero al que se le detuvo en su lujosa mansión de
Londres.
La
connivencia de políticos y banqueros resultó castigada en distinta medida por
los tribunales.
Los banqueros, Ragnar Z. Gudjonsson,
director ejecutivo y Jon Thorsteinn Jonsson, presidente del consejo de
administración del banco Byr, fueron condenados a cuatro años y seis meses de
cárcel por otorgar préstamos millonarios, sabiendo que el banco estaba en
quiebra.
Laurus Welding, expresidente del
banco islandés Glitnir (Glitnir Bank HF), y a Gudmundur Hjaltason, exjefe de
finanzas, fueron condenados a nueve meses de prisión. El juzgado de Reykjavik
los halló culpables de un fraude a la nación por 53 millones de euros.
El exprimer ministro, Geir
Harrade, fue absuelto de las imputaciones más graves, aunque sí condenado por
delitos menores.
Baldur Gudlaugsson, exsecretario
permanente del Ministerio de Finanzas, fue condenado a dos años de prisión.
Vendió sus acciones en el banco Landsbanki antes de que quebrase, con lo que
ganó 1.2 millones de euros.
Otras condenas fueron de carácter
económico. Algunas causas siguen pendientes
La salida de
la crisis en islandia
En este momento, Islandia puede
ofrecer una gestión con éxito. Aunque el FMI eliminó las ayudas a Islandia,
ahora alaba su recuperación económica. Un crecimiento del PIB del 3,3%. El
turismo y las exportaciones de pescado, especialmente de bacalao, son los
principales sectores. El turismo el la primera fuente de ingresos por delante
del sector pesquero y del aluminio, lleva tres años creciendo a un ritmo de
entre el 15% y el 20%, motivado por la devaluación de la moneda, y el país de
320.000 habitantes, recibe cada año un millón de turistas, procedentes sobre
todo de Europa, Estados Unidos, y ahora también de Asia.
En relación a España el presidente
islandés destacaba que está entre los diez principales consumidores de bacalao
islandés, y que “la lengua española ya se ha convertido en la segunda
extranjera más importante, por delante del francés o el alemán”
Islandia
y la UE
La adhesión a la UE sigue todavía
lejos, el presidente aseguraba que la sociedad islandesa es muy euroescéptica,
y que la política de pesca de la UE es inaceptable para ellos.